Delincuentes desvalijaron el taller mecánico de un ex combatiente de Malvinas

Lo que se presentaba como una jornada más de trabajo para Hugo Villegas, resultó ser una verdadera pesadilla. Este viernes por la mañana cuando llegó al taller junto a su compañero, Armando Amaya, descubrió que los habían desvalijado.

Delincuentes ingresaron a la propiedad (ubicada sobre la calle Los Álamos) después de derribar una tapia de ladrillos, que “estaba un poco débil”. Una vez adentro sustrajeron todo lo que tenían a su alcance.

Según relató Villegas en declaraciones a El Chorrillero, le robaron todas las herramientas de mano, lo dejaron vacío. Destornilladores, todo tipo de pinzas y tamaños, reglas, entre otros objetos.

“Me cortaron los brazos, no me dejaron nada, no tengo nada, ni un destornillador. Pero tengo que buscarle la vuelta y tratar de seguir. Es el pan mío, de mi familia, el de cada día. Si no trabajo no tengo para comer, ni para vivir, sobre todo con la situación de la pandemia”, sostuvo en medio de una angustia no será fácil de calmar.

Villegas es un ex combatiente de la guerra de Malvinas y se desempeña en el oficio de los fierros desde los 14 años. Hoy tiene 58.

Después que se conociera el hecho, comenzaron a llamarlo sus colegas para solidarizarse y también para ofrecerle ayuda.

Esta es la tercera vez que sufre la inseguridad, en el mismo lugar. La diferencia es que ahora no tiene cómo reponer todo el material que le quitaron.

“No son ladrones son rateros que se llevan las cosas y las venden por dos pesos. A uno le cuesta con sacrificio todo esto. Laburé toda mi vida y trabajar así para que de un día para otro te roben. Es muy doloroso”, señaló.

Remarcó que en la zona, que es parte del Barrio Celestina, falta seguridad.

“En los primeros tiempos había presencia de la Policía Ciudadana, ahora ya no. Había por lo menos dos que caminaban. Es una ola de robos terrible, es vergonzoso lo que está pasando”, indicó.

Luego de su descargo, claramente emocionado, pidió que, en el caso de ver alguna venta de herramientas por las redes sociales no compren y avisen a las autoridades.

“Me duele el accionar de estos chicos que me robaron todo el sacrificio. Estoy destruido. Estos hdp roban de todos lados porque salen a venderlos por monedas. Es muy triste”, completó.